domingo, 27 de julio de 2014

Y vivieron muy felices

Sábado 26 de julioCerca de la media noche
Es la ley de la vida y también de la física, tratándose de materia, nada es para siempre, todo se transforma. ¿Qué sería del humano si no tuviera noción de su espíritu?
Mi entrega previa fue el sábado 19 de abril y en ese entonces llevaba más de mes y medio sin escribir; me sentía abochornado por mi falta de consistencia, pues ahora me siento el doble de apenado ya que no fue uno, no fueron dos ¡fueron TRES meses que dejé de escribir!.
Ya ni llorar es bueno y como dice el dicho popular norteamericano (de los norteamericanos que hablan inglés): La mejor noticia es que no haya noticias.
Pues entonces ¿Qué pasó en estos tres meses?
A manera de disculpa: no escribí porque yo quería hacerlo una vez que tuviéramos los resultados de todos los laboratorios a los que se mandó un cachito de médula de Patricia. Su paseadora médula se fue a dos laboratorios de Guadalajara, uno de Puebla y otro de Estados Unidos. Para el doctor Rodríguez Carrillo el resultado concluyente fue el del laboratorio de Puebla; y así, el 2 de julio (hace apenas 24 días), recibimos el último reporte que textualmente dice lo siguiente:

“ y los resultados dicen.................. que no existe enfermedad, yo no vi nada, la computadora no encontró nada, la enfermedad molecular no está, el cariotipo(los cromosomas) regresaron a la normalidad.

Conclusión: Remisión molecular de la enfermedad

Plan: Visitarme cuando tenga 4 semanas de estar tomando el Exjade con análisis de laboratorio BH, química sanguínea de 4 elementos, perfil hepático y determinación de ferritina sérica, examen general de orina, cultivo de orina.

El catéter mantenerlo lo que resta de 2014, acudir al San Javier cada mes a mantenimiento.

SE PUEDE OPERAR DEL TOBILLO CUANDO GUSTE, los glóbulos blancos poco a poco se van a recuperar

Conclusión 2: felicidades

En su momento ya le diré cuando hay que darle seguimiento a la enfermedad molecular, la voy a ver cada mes con análisis, hasta que el hierro se disminuya, después cada 2 meses y después cada 3 y después cada 6 meses y después cada año por 5 años.

Beba vino, salga de vacaciones, haga lo que quiera.

Saludos a todo el equipo Ríos.

Rodríguez Carrillo”.

Como pueden ver claramente en la fotografía que les adjunto no se observan células de leucemia en la médula, No es necesario explicar que se trata de un “product shoot” fotográfico de una célula nodriza de Patricia (repito nodriza, si estuviera enferma fuera madriza), ¡Claro! Me refiero a la célula del centro, y como saben las bolitas alrededor son glóbulos rojos jóvenes (por eso se ven como moraditos), los cuales se nutren de hierro. ¡Totalmente normal!
¡Quéééé bonitos globulitos! ¡Quééééé bonitos globulitos!

Es así que el 12 de julio de 2014 damos fin a la temporada uno de la mini-serie "LAM M-3". Esperamos que no haya temporada dos.

¿De dónde sacamos la fecha?... Pues me despido con la última anécdota de la temporada.
Como ustedes recuerdan, hace un año nos fuimos de vacaciones a Alaska, Coco, Oso, Patricia y yo (Oso durmió conmigo). Patricia hizo el viaje con bastón porque tiene una patita retefregada (la pobre). La idea era operarse regresando. De regreso de Alaska nos alcanzaron los ahorritos para pobremente, casi casi de mochileros ir a Napa, y a Sonoma y Gomorra en California (imagínense nuestra entrada al InterContinental, con apariencia de haber llegado en “La Bestia” desde Honduras hasta San Francisco).
En Napa, el último viñedo que visitamos fue uno de nombre “Alpha-Omega” y resulta que cuando llegamos a la visita Patricia ya no se quiso bajar del carro, Coco y yo pensamos que se había adormilado con tantas “pruebitas de vino” que regalan por esos rumbos, pero no, la realidad es que ya venía enferma. Las aftas con las que se manifestó la leucemia ya las traía en ese momento (y no nos decía la socarrona)… Abro paréntesis: (cuando nos veamos en persona me recuerdan que les platique nuestro cruce en bicicleta de San Francisco a Sausalito, ahora sé que lo hicimos con una enferma de leucemia sin glóbulos blancos, un accidente en ese momento por pequeño, hubiera sido fatal ¿todavía hay alguien que no cree en los milagros?), cierro paréntesis. Bueno, todo eso lo platico no por presumido sino porque en Alpha-Omega me gasté mis últimos centavitos en una botella de vino (Chardonay 2010), que a Coco y a mí nos pareció que a Patricia le iba a gustar muchísimo y que nos trajimos a México.
Esa botella la abrimos el 12 de julio pasado, fue el vino más delicioso que hemos tomado en nuestra vida y no fue tanto por el sabor (sí estaba muy bueno), sino porque fue la noche en que le pusimos FIN oficial al primera temporada de nuestra leucémica aventura (y a las vacaciones de hace un año).
Digo primera temporada y hasta cambio de párrafo para aclararlo porque, vuelvo y repito: hasta dentro de 5 años nos dan de alta, ya vieron ustedes el mensaje del doctor.
Hoy. La señora Patricia no está en casa. Se fue con Coco a México a pasar el fin de semana (museo Soumaya, de Antropología, Wicked, comida con amigos, Laura Elisa y su doctor, Mundo, Meche, etc…), regresan domingo a la media noche (imagínense lo sana que está y lo temeraria que se volvió, que viajó por Viva Aerobús, antes ¡Qué esperanzas!).
El próximo jueves: operación de pata. No haré blog de esa intervención quirúrgica, mejor llámenle o vengan a visitarla o pregúntenme. No podrá apoyar el pie en 3 meses y el primer mes es de reposo absoluto.
Y es así como llegamos al final de las transmisiones de una lucha campal, en la cual se enfrentaron, por un lado una horrible bruja maldita llamada Leucemia Aguda Promielocítica (LAM-M3) y por el otro la familia Ríos, Dios y sus amigos (amigos incluyen a la familia). Un año nos bastó para ganar entre todos. De diagnóstico a remisión en un año. ¡Increíble milagro de Dios y de la ciencia!
Muchísimas gracias a todos por sus oraciones (tenemos que seguirlas por 5 años más). Gracias también por sus pensamientos positivos, por su comprensión, por sus palabras de aliento, por sus consejos, por sus recomendaciones, por su apoyo moral y físico, por su sangre, sus mermeladas, sus berenjenas (parmigianas)… Y cuando escribo esto pienso en cada uno de ustedes, todos los donadores de sangre, algunos que ni siquiera sé quiénes fueron, o cómo se llaman, otros entrañables y fieles como los Luthe (Rodolfo me dijo que Patricia “ya no tenía la infección” desde tres meses antes de la remisión oficial, con una técnica de diagnóstico maravillosa que él maneja); todos mis amigos del IPADE (la sangre de Pablo convirtió a Patricia de simpatizante a fanática de Dione), Enrique (Plazita); todos nuestros amigos de la RUP, tío Barajas, Teodoro, Camilo, Pedro Juan, etcétera; de la RUL, Lulú, Martuchis, Laura Elisa, Chelito y muchas más; todos nuestros amigos de la Colón, Toño, Elisa, Meche, Sonia, Conchita, Elizabeth, etc., etc., etc., etc. (gozosos cantemos un himno de gloria); todos mis compañeros de IHG, Carmen (y la artillería pesada directa del cielo, entonces más bien la fuerza aérea), Lorena (fan del blog), Tere; familia, hermanos, amigos ¡Gracias! Zorrilla, Gaby y Jesús, Oscar y Ceci, Jorge y Laura, Pepe y Sonia, Luna y Maya (Omar y Erica), Alehuerta, Gaby y Luiggi, Paty-Ara-Raúl-Alfonso, Mundo y Meche, Lizy y Monti, Rocío, Karla, Ricardo, Caro, Memito, Graviela, Ricardo y todos los López del Mundo, José y Paty (inolvidable e impactante sesión espiritista a la que me metieron sorpresivamente en la que un médium te convence de que te vas a aliviar con los "Miaditos de Vergara", aunque no estés enfermo ¡Buenísimo!), Blanca (y sus Guerreros), Hugo, Norma Patricia, Tere, Héctor, Zuly; las compañeras del inglés de Patricia (súper de buena sangre), Liz, Gus (de sangre buena pero incomprendida), todos los Traconis del mundo, todos los Terrazas del Universo y más, Gerardo, Javier, Mariana, Juanita, Octavio-Gaby, Katy, EOS, Gerardo, Jorge, Gaby, Mariela, Ro y Gris (gracias por su visita), Alejandro Ortiz Monasterio, la tía Luz, Víctor-Paty-Ceci, Paty y Peti, Luís y Gaby, todos los García Romo, las enfermeras y trabajadores del San Javier, grupos de oración de Héctor (seminaristas), Zuly (su comunidad), Rodolfo (cadena de oración), los ministros de la comunión, Don Nacho, Don Joserra, Don Andrés ¡Hugo, Paco y Luís! ¡Jesús, María, José, Joaquín y Ana! ¡Santa Bárbara Doncella! ¡San Jorge Bendito!, Pedro, Lino, Timoteo, Clemente, Policarpo, Crisóstomo, Timoteo, Bernabé, Justino, Atenágoras, Irenéo, Tertuliano ¡Uno, dos, tres por mí y por todos mis compañeros! En estos momentos todos, todos están pasando por mi mente, ninguno se me escapa, pero la mente es más rápida que la velocidad con la que escribo (siempre he sido mala secretaria calígrafa), así es que mejor aquí le paro (o adjunto un santoral y un directorio telefónico –sección blanca-). Yo sé que me falta mencionar a muchísimos, no es mi intención. ¡Muchas gracias a TODOS!
Si se me pasó incluir en este agradecimiento a alguien, ojala que sea alguien que tenga homónimo en la lista anterior para que no se dé cuenta.
O mejor como decía Rómulo Lozano: “¡A los de arriba!-¡Gracias!, ¡A los de abajo!-Gracias!, ¡A los de en medio!-Gracias!,  “A los camarógrafos!-¡Gracias!”
Son tres los Santos a los que nos encomendamos, San José María, San Juan Pablo Segundo y Don Álvaro del Portillo (a punto de recibir su merecido título). ¡Cómo no se iba a curar Patricia con las recomendaciones de tan persistentes e influyentes Señores!
¡Gracias Dios!
¡Gracias Doctor José Rodríguez Carrillo!
Y como Radio Recuerdo, “¡Gracias-muchas gracias-y que siga-que siga la música…!”
Gracias Patricia, Felipón, Paco, Coco, Pau y Oso.
… Y vivieron muy felices.


FIN.

sábado, 19 de abril de 2014

Del Patrón, artefactos y cosas mejores

Sábado 19 de abril
Vísperas del domingo de Resurrección

El dolor y la tragedia son inevitables en la vida de todo ser humano, su consecuencia suele ser la muerte; pero de ellos, siempre surge la vida, y con ella la esperanza, y con ella la alegría. Ayer recordamos una de las peores y más anheladas tragedias de la humanidad (la paradoja mayor): la Pasión y Muerte de Nuestro Amigo (y Señor) Jesucristo y mañana domingo, la alegría de su resurrección, esperanza en nuestro futuro, que siempre es mejor. Por nosotros murió para que viviéramos.

¿Qué ha pasado en un mes y diecinueve días con nuestra vida?
El 17 de marzo fue el último día en que se le suministró trisenox (arsénico) a Patricia. Los exámenes de sangre salieron bien y a mediados de mayo se le hará una biopsia de médula ósea para confirmar la remisión. Si continúa limpia por cinco años, entonces la darán de alta.

Tuvimos un pequeño sustillo el cual fue mi pretexto perfecto para no escribir en el blog por más de un mes; se los platico:

En la primera semana posterior a su tratamiento Patricia sufrió de dolores de cabeza muy diferentes a los de su habitual migraña, por lo que consultó con un neurólogo que a su vez le pidió una resonancia magnética, el resultado arrojó la posibilidad de células cancerígenas en el cerebro; posibilidad que debía descartarse a través de un estudio de líquido céfalo raquídeo. Si el estudio confirmaba los temores del neurólogo, habría que iniciar quimioterapias de manera inmediata.

No lo aceptamos. Ni el Dr. Rodríguez Carrillo, ni Coco, ni yo, y muchísimo menos Patricia. Según Coco y su colega el Dr. Carrillo la leucemia no se transmite a otras partes del organismo (no hace metástasis) y tener otro diagnóstico de cáncer en otra parte del organismo en menos de doce meses, sería como sacarse el premio mayor de la lotería dos veces en el mismo año.
Había la remota posibilidad de que la imagen de las células malignas fuera un “artefacto”, que dizque dicen los doctores que a así se le llama a una falla técnica de la resonancia (si fuera una fotografía, diríamos que, como si saliera velada, borrosa o movida); por lo tanto, Patricia se hizo nuevamente el estudio en otro laboratorio, con otro aparato, otro neurólogo y otro radiólogo, quien obtuvo una preciosa fotografía cerebral de Patricia totalmente limpia de células cancerígenas, por lo cual, se descartó totalmente la posibilidad de cualquier complicación. ¡Se curó sacándose otra foto! Ojala y que a mí se me quitara lo feo sacándome fotos, hasta que saliera una que me gustara.

Patricia se está fortaleciendo, come (muy) bien y ya regresó al gimnasio. Nuestra casa se colmó de normalidad con el regreso del Patrón y del Solovino.
Solovino regresó de la casa de Oso con dos palabras nuevas "corre" y "gorda". Y sabe muy bien a quien referirse cuando las utiliza ¡Inteligente perico!
Y con respecto al Patrón, ya extrañaba mis periódicas catarsis en las que le grito que es un inútil, que estoy harto de limpiar la suciedad que deja por donde va caminando y remato con ¡Patrón: eres un hijo de perra! (sí lo es, nada más mírenlo). Parece que el guato le cae bien porque en lugar de gruñir me sonríe y me mueve la cola con entusiasmo, entonces no me queda más que cantarle la de Facundo Cabral, esa que dice: “Pobrecito mi Patrón, piensa que el perro soy yo…”



Y regresando al tema que nos ocupa (perdón por desvariar).
Cuando comenzamos esta leucémica aventura pensé que este blog se convertiría, entre otras cosas, en un registro de nuestras experiencias con todas las medicinas alternativas que nos recomendaron; sin embargo, como recuerdan (si leyeron los primeros registros) decidimos ponernos en las manos del doctor Rodríguez Carrillo quien desde el principio nos dijo “es una leucemia curable” y sólo nos pidió seguir el tratamiento al pie de la letra. Evidentemente es una persona con mucho conocimiento y su experiencia fue vital en la adecuación del protocolo según evolucionó la enfermedad; así como del cambio de quimioterapia a trisenox.

Sin embargo, con toda su capacidad, el doctor Carrillo nos dijo desde el principio que necesitaba dos cosas: mucha oración y la familia unida. ¿La oración y el amor son medicinas alternativas? Yo diría que no. Simplemente son medicina. Y gracias a todos ustedes hemos tenido oración y cariño familiar a raudales.
Efectivamente hemos recibido gran cantidad de recomendaciones de medicinas alternativas para la curación de la leucemia: uvas (negra con semilla y cáscara), guanábana, comer todas las variedades de berries, dieta vegetariana, comer proteína, no comer proteína, tomar café, no tomar café, tomar agua oxigenada (Oxytam), tomar agua estructurada, microinmunoterapia, imanoterapia, curación por grupos y redes neuronales, terapia de perdón y de auto liberación, bicarbonato, hartarse de Omega 3, Inmunocal y productos Omnilife, acupuntura, Reiki, yoga, meditación, medicina china oncológica, un buen amigo me ofreció mandar “en el siguiente vuelo a Guadalajara a un chamán muy bueno” (Tepozteco). Me pregunto si no hubiera utilizado todo esto si el diagnóstico y posibilidades de sanar hubieran sido diferentes.

Seguramente vamos a utilizar alguna de esas terapias en la etapa de remisión, por ejemplo: ya tiramos el microondas a la basura, vamos ir al Reiki (se siente rico), voy a comenzar con el yoga (ando malo de mi columnita vertebral y Patricia se iba a operar el pie antes de enfermarse), comemos proteínas, no comemos proteínas, tomar agua estructurada, comer sano (una copa de vino al día) (o dos) (religiosamente), hacer ejercicio y tomar café.

Y pues, como dicen los cronistas de beisbol, “esto no se acaba hasta que se acaba”, necesitamos que ustedes nos den más medicina. Les pido por favor sus oraciones y su cariño para asegurar que los análisis de mayo salgan bien y así continúen durante cinco años hasta dar por terminada esta batalla contra la leucemia, que gracias a Dios todo parece indicar que no llegará a guerra.

Les volveré a escribir al conocer los resultados del examen de mayo.

¡Felices Pascuas!

domingo, 2 de marzo de 2014

Las doce y sereno… Sereno moreno…

Sábado 1 de marzo
Media noche

Ya sé que la mayoría de ustedes está pensando que soy un alienado social, carente de identidad matriarcal y les concedo la razón.

Llevaba casi 7 semanas sin subir información a la bitácora de mis memorias. Ya no tengo argumentos para solicitar disculpas a no sé quién de aquéllos que aún de vez en cuando se detengan en esta esquina de la vida para echar un fugaz vistazo buscándonos y que al hacerlo, se encuentre sólo con una calle solitaria y brumosa.  Nada he comentado en siete semanas en esta carta que escribo a todos y a nadie, ésta que me permite sentirme cerca y sentirlos conmigo sin que estén. Esta carta que le ha dado una nueva dimensión a mi entender del ser y del estar gracias a todos ustedes quienes aún en la ausencia están y son nuestros amigos.
En esta ocasión no los voy a aburrir con retos, reflexiones, fumadas o “Pipeaventuras”. Me concentraré en ofrecerles un resumen de mis memorias de 7 semanas (no precisamente en el Tíbet).

1.       Desde la última vez que escribí, Patricia lleva dos sesiones de 14 días de tratamiento y está a unos días de terminar su segundo periodo de descanso de estas siete semanas. Es el que les he platicado que se integra a su vida de una manera casi normal, sólo redoblando precauciones para no contagiarse por virus o bacterias de alguna enfermedad que complique su proceso.

2.       Ella sigue reaccionando muy bien al tratamiento. El arsénico no me ha matado, y aunque moría por sus besos, ya no lo hago. Parece que ya sólo será una, tal vez dos las veces que regrese a los 14 días de terapia. Próximamente le practicarán un aspirado de médula y si el estado de remisión continúa, se suspenderá el tratamiento para esperar que la bendita enfermedad no regrese en 5 años, sólo hasta entonces se dará de alta. El doctor está muy optimista –al igual que todos, sólo que él con conocimiento científico de causa- tanto así que tal vez hasta le quite el catéter.

3.       Coco continúa en el internado, estudia mucho, se desvela mucho. Creo que ve muy poco a Oso y yo también he visto poco al Oso, ahora sí, como decía Charly Díaz Garcilazo: “no hay Oso”. Coco se está interesando por la hematología y por la oncología y el doctor Rodríguez Carrillo la está apoyando mucho.

4.       Paco sigue trabajando en “La Pinta Negra”, cubre diferentes posiciones operativas (mesero, cocinero) y administrativas (cajero). Esperamos que a mediados de año se pueda enrolar en una maestría, para la cual ya está en trámites.

5.       Felipón sigue en Culichilandia, la que parece que cambiará de nombre a Chapolandia en los próximos días. Va muy bien, acaba de llegar a su presupuesto del primer trimestre. Hoy está en Monterrey con Pau, en una boda de un amigo del IPADE, parece que cada 8 días se casa uno de sus compañeros del IPADE. Me pregunto si no estará él próximo a enlistarse en el club de los casados. Ya muchos amigos de mi edad son abuelitos (y uno que otro tiene bebé propio…¡Hola tío Barajas) ¿Cuándo nos tocará a nosotros regresar al mundo de los pañales enmostazados?.

6.       Yo no he salido mucho de viaje, sólo una semana anduve por la fría Atlanta (varado dos días en un hotel por las nevadas), regresaré por aquellos rumbos la próxima semana (y sigue frillito); también hice un recorrido de una semana por Chiapas en donde tenemos cinco hoteles muy buenos (recuerden que tienen derecho a su trifa de “Friends & Family” en nuestros hoteles), así que tuve la oportunidad de estar en Tuxtla Gutiérrez, San Cristóbal de las Casas y de pasadita en Tapachula, mis amigas Laura Elisa y Martuchis se enterarán por este medio que estuve cerca de su terruño, pero les prometo que lo hice de entrada por salida y sin tiempo para lo social. También fui tres veces al DF (incluyendo Tlanepantla) y una vez a Puebla, y otra a Oaxaca y el fin de semana pasado a Puerto Vallarta en donde me tocó compartir con el gobernador de Jalisco el honor de inaugurar el Holiday Inn Express ¡Vieran qué bonito!. Algunos amigos me llamaron para decirme que me vieron en TV, robándole cámara al gober (yo soy más guapo e inteligente sin lugar a dudas) desafortunadamente, la captura del Chapo distrajo la atención del respetable público y ya muchos no me vieron, o no me reconocieron porque en tv me veo más cachetón.

A veces he iniciado mis viajes en domingo o regresado en sábado, así es de que tal vez estos viajecillos, aunque pocos influenciaron en el hecho de que no escribiera en el blog.

¡Pues sí muy machote tú! Cuando comenzaste a escribir tus dizque memorias estabas de vacaciones dedicado 24/7 y de C/A (cuerpo y alma) a Patricia. Y ahora que tienes que seguir ganándote el pan con el sudor de tu frente, ya no quieres escribir tan seguido ¡Eres igual que todos!

(Esa voz que dictó el último párrafo, no fue la mía, fue la voz de mi conciencia)

7.       Lo peor y lo mejor de estas siete semanas.

Lo peor: nada.

Lo mejor 1: Obviamente cómo se ha desenvuelto nuestra leucemia.

Lo mejor 2: Uno de los mejores fines de semana de mi vida. En una de estas que el doctor le prescribió vida normal a Patricia, decidimos pasar un fin de semana nada normal: nos fuimos de vacaciones ¡a Guadalajara!, comenzamos el sábado comiendo hamburguesas en el “Pig Pearls” (ensalada de arúgula, vinito y cerveza artesanal), con misa dominical en la catedral, sábado en la noche cenamos churros con chocolate en “La bombilla”, y caminamos por Chapu (los dominios de Paco) hasta que nos dio el domingo; cerramos con un concierto en el Teatro Degollado (Tchaikovsky) y comida con los Jiménez en el “Chez Choux CHoux”. ¡Todo de lujo! Regresamos a Zapopan el domingo ya tarde con unos kilitos de más, medio cansados pero con sendas sonrisas de oreja a oreja (cuidado que senda no es camino o ruta, ni significa grande, sino cada uno con su cada una).

Pues con este arranque de maestro Arrigo Cohen me despido con la promesa de escribirles la próxima vez.

¡Feliz Marzo!

sábado, 11 de enero de 2014

Todo diciembre, y 10 días de enero.

2014 d.c.

Diciembre.

¿Cuál es mi pretexto? ¿Cómo fue que logré que Ana Frank quiera venir del más allá nada más para agarrarme a cachetadas guajoloteras?.
Pues muy fácil, parece que mis memorias se han convertido en mis olvidos… Voy a tratar de justificarme, ahí voy (1, 2 … 3):

Es que no he escrito porque hace mucho frío y cuando se me enfrían los pies se me atrofian las neuronas… ¿No les gustó ese pretexto?
Bueno, la verdad es que no ha pasado nada extraordinario… ¡De veras!... Bueno, solo que terminó el 2013. Lo cual en realidad no tiene nada de extraordinario. Me explico: desde que inició la época cristiana han terminado 2013 años, cada uno con sus trescientos sesenta y tantos días; y no sólo eso, ya antes habían terminado muchos otros, si no me creen, pregúntenle a los chinos, si mis cálculos no me fallan, ahora en enero ellos terminan 4711 años (hasta en eso nos ganan los chinitos).

Y así, sin comunicarme con ustedes, he navegado por más de un mes cavilando acerca de lo ordinario y lo extraordinario.

Es ordinario vivir; sin embargo es extraordinario vivir. Es ordinario nacer y es extraordinario morir (sólo se muere una vez en la vida). Extraordinaria es la salud y nada nos parece más ordinario que la salud. Ordinario es el encuentro y el adiós, tanto como ambos son extraordinarios.
Las conclusiones me confunden y me paralizan ¿me petrifican? ¿Me convertí en estatua de sal por voltear para atrás?

La vida es ordinaria y de suyo extraordinaria, aunque no necesariamente extraordinaria. Sí es, pero es necesario que sea para que sea. Tal vez porque es, no nos esforzamos para que sea y por eso no es.
Bueno, ¿Pues qué me pasa? ¿Cuál es el punto? ¿A dónde quiero llegar? ¿A dónde vas Felipe con tus ínfulas de Hamlet? ¿Qué pues?

Pues que con todo lo extraordinario que me ha pasado en 2013, siento que mi vida en vez de ser extraordinaria está estancada en lo ordinario.
Patricia me está poniendo el ejemplo, desde que se enfermó ella es una mujer mejor, definitivamente, los que la conocen no me van a dejar mentir, es más tranquila, más analítica, más estudiosa, más disciplinada, más espiritual. Su enfermedad que es extraordinaria la está afrontando de una manera extraordinaria, y con todo y lo que tener leucemia pueda significar, está viviendo una calidad de vida mejor que la mía.

Hace poco le escribí a un amigo que tiene algunos meses que no veo, y en mi correo le describí lo que había hecho desde la última vez que nos saludamos, concluyendo: “en resumen  Rodolfo (Luthe), desde la última vez que nos vimos no soy un ser humano mejor”; es decir, lo ordinario de lo ordinario, nazco, crezco me reproduzco y muero.

Pero bueno, no leen este diario por mí y mis circunstancias, sino para saber cómo está la más bonita de las hijas de mi suegra.
El 4 de diciembre del año 2013 de la era cristiana, Patricia regresó a su tratamiento con trisenox (arsénico ¿se acuerdan?), como ya les he platicado, tuvo que ir diariamente al hospital por 14 días a que le aplicaran por el catéter la mentada medicina (¿recuerdan qué es un catéter?).

Un día sí y otro no le sacan sangre, lo hacen para medir el efecto de la medicina en el organismo y constantemente le monitorean el corazón para evitar que el desenlace sea fatal. Si el doctor nota algún tipo de sufrimiento le receta un antídoto y así pasa alrededor de 6 horas diarias en el hospital. El arsénico ha resultado mucho menos agresivo que la quimio que le habían puesto al principio de la enfermedad; sólo se le hinchan los cachetes un poquito durante los 14 días, pero se le desinflan al terminar éstos. Anda peinada de casquete corto, rebajado desde la coronilla (al estilo Padre Armando), el poquillo pelo lo tiene chinito chinito, se ve muy bien. ¿Han visto el look que trae Lupita Dalecio? Pues hagan de cuenta.
Dado lo anterior, para el 18 de diciembre terminó la sesión hospitalaria, yo salí de vacaciones desde el 20. A partir del 22 de diciembre recibió estrictas órdenes médicas de “darle vuelo a la hilacha”, y así, cumplió cabalmente con la rutinaria costumbre anual de desaparecer en solo dos días nuestro frugal aguinaldo de juguetería, pensé que no lo iba a lograr pero no nos defraudó.

¡Hasta arbolito y Nacimiento!
Estuvimos todas las vacaciones apaciguados en casa, cenamos temprano el 24 de diciembre, los seis, mi suegra, Patricia, Coco, Paco, Felipón y Yomismo. Cenamos un paquete de “Los Arcos”, para seis (total del paquete fueron $2,400 pesos entregado a domicilio, “ta-bien-¿no?”), un kilogramo de langosta, otro de salmón y seis medalloncitos de carne de vaca, harta ensalada, pan, y sólo adicionamos el imprescindible vinito, blanco para las niñas tinto para los niños. Ni siquiera nos tocó lavar trastes (todavía estoy adolorido del cumpleaños de Felipe ¿se acuerdan?) (yo no). Nos dimos nuestros regalitos que nos dio el niñito Dios, no faltaron los calcetines, las camisetas, los desodorantes y los pants…

Con el canijo frío y los días cortos nos convertimos en crisálidas, nuestra casa (principalmente la cocina) fue el capullo, el calor lo obtuvimos del fogón de la estufa, de un buen chocolate chiapaneco, de unas cobijotas y sobre todo de la Sagrada Familia hospedada en nuestro Nacimiento.
Tuvimos algunas visitas que alegraron aún más nuestro espiritu navideño y dos lamentables fallecimientos que lo entristecieron. Un amigo de la RUP y el cuñado del tío Barajas, ambos michoacanos, uno muerto por manos de un criminal otro por un inesperado infarto fulminante. Ambos antes del 31. Ambos amigos. Ambos buenas personas. Ambos en el cielo más cerca de Dios intercediendo por la salud de Patricia.
Recibimos muchas muestras de cariño, algunas de ellas son testimonios de sus oraciones, las cuales atesoramos y las usamos: imágenes de la vírgen, de arcángeles y una reliquia de Monseñor Álvaro del Portillo que nos trajo el hermano de Carmen de Roma, en donde está la tumba de Don Álvaro y de San José María, desde donde nuestro amigo oró y pidió por la salud de Patricia.
 
La familia Traconis nos trajo romeritos y pierna, y a sabiendas de mis debilidades enológicas, gracias a muchos amigos, volví a llenar mi cavita de vinos que ya estaba en las últimas (¿en algún lado les comenté que una de las cosas qu aprendí de la enfermedad de Patricia es que el doctor que cura la sangre es el hematologo y no el enologo?).
Patricia ya está en su tercer rompe cabezas de mil piezas cada uno y yo para no quedarme atrás, además de andar con los tres libros que tengo comenzados para arriba y para abajo, volví a leer como lo he hecho varias veces en mi vida por estas épocas “Navidad en las Montañas” de Ignacio Manuel Altamirano. ¿A quién darle las gracias? ¿A Altamirano por escribirlo o mi maestro Sandoval de prepa por guiarme a su descubrimiento?

¡Mucho frío para escribir diarios! ¡Poca cosa que decir! Mis tres lectores de vacaciones, no me iban a extrañar.
31 de diciembre. Fuimos a cenar al AnitaLi, ya saben, el lugar MUY feo, el servicio bueno (aunque demasiado rápido considerando que llegamos a las 9:00 pm y que disponíamos de tres horas hasta la llegada del Año Nuevo), la comida que normalmente es muy buena en esta ocasión estuvo solamente buena a secas, pero la pasamos muy bien, a la comitiva del 24 de diciembre se separó mi suegra (que ya no está para esos trotes) y se unieron Pau (novia de Felipe) y Oso (novio de Coco).

¿Y la enfermita? Dijo el doctor ¡vida normal! Y allí fue donde comenzó todo el enredo que dio inicio a esta nueva conversación:
Lo normal es extraordinario.

Enero.
Coco entró al hospital a hacer su internado el día 1 de enero de 2014, yo a la oficina el 2. El domingo 5 terminaron las vacaciones de Patricia y regresó a su tratamiento. Son catorce días de cuidado, mañana cumple los primeros seis. Ayer en la noche nos visitó el Dr. Rodríguez Carrillo para decirnos (pónganse abusados) (ustedes, tres lectores, pónganse abusados) (pónganse abusados no fue lo que nos dijo el doctor), lo que dijo fue:

1.   “Estoy muy contento porque los exámenes de sangre están saliendo muy bien, continuamos en remisión molecular”

2.   Depende de cómo salgan los estudios y cómo la vea, podríamos repetir el tratamiento tres o cuatro meses más” (14 días de tratamiento con 14 de descanso)

3.   “Si la situación se mantiene como hasta ahora, al término de los tres (o cuatro) meses (sí, meses), se suspenderá el tratamiento”

4.   Después de eso se hará un monitoreo periódico y si todo sigue bien, en cinco años, termina la remisión y se da de alta
¿Qué notan de las palabras que remarqué? Yo lo resumiría de la siguiente manera:

La moneda aún está en el aire, necesitamos que continúen todos ustedes ayudándonos cargando los dados a nuestro favor con sus oraciones, con el favor de su amistad y con su cariño, que son extraordinarios.
Ahora es casi la una de la mañana, no voy a subir este texto al blog, terminaría como a las 3 de la mañana y tengo que levantarme a las 7:00 am para llevar a Patricia al hospital. Ya vino Patricia a regañarme dos veces porque no me voy a dormir (eso sí, no se le ha quitado lo regañona conmigo).

Lo subiré mañana sábado.
Treceavo reto: Un dilema ¿dormir, soñar y vivir? o ¿soñar, vivir y dormir?


Nota: No encuentro como administrar los mensajes que ustedes me envían al blog, a veces se ven y a veces no se ven, pero tampoco sé cómo responderlos cuando los veo, pero les doy mi correo privado por si quieren hacernos algún comentario o por la página de Facebook.

Mi correo privado: riosromo@gmail.com

¡Hasta luego!